SiEMPRE TRATE DE HACER REALiDAD TODOS SUS SUEÑOS

Para soñar, primero hay que dormir. Es ésta una verdad que no se discute. Estudios médicos sostienen desde hace años que todos soñamos al momento de dormir. Pero sólo algunos se recuerdan al despertar las escenas. Éstas pueden ser placenteras. O ser una pesadilla la que lo despierte sobresaltado, agitado y transpirando helado. Y en un apartado especial está el ludópata. A éste no le importa el guión del sueño. Sólo intenta divisar los números de un vuelto que recibe, de la chapa patente del auto o acordarse si era el 47 o el 48 el que debería jugar al despertar. Pero casi todo el menú a nuestro alcance de los sueños es lindo. Son expresiones de deseos que en un porcentaje bajo, salvo que usted sea Nostradamus, se cumplen. Como por ejemplo que se hace millonario con un juego de azar y que se olvida del trabajo. O que se va a vivir a Mónaco y una de las princesas Grimaldi cae hipnotizada en sus brazos y se compra una Ferrari. Se le aparece John Lennon y le suplica que integre Los Beatles porque duda del talento de George Harrison. Woody Allen le ofrece un papel estelar en su próximo filme. Suena el teléfono. Y en español Monica Bellucci le dice que está en su puerta y quiere entrar. O sueña que Luis Miguel la invita a cenar o que se da vuelta y es Antonio Banderas y no su piltrafa predilecta el que la tiene abrazada. O algo más terrenal: se ve jurando, con la diestra sobre la Biblia, como senador nacional y sus parientes tirando bombas de estruendo y fuegos artificiales en la afueras del Congreso de la alegría de saberse asesores suyos. Persiga su sueño y trate de hacerlo realidad ya que "La vida es sueño" sostenía Calderón de la Barca.