Más preocupado por la difusión del SIDA que por la Crisis Financiera que corroe los cimientos de Occidente, Su Santidad aconsejó en su reciente visita al África que la Abstinencia, el difícil ejercicio de decir que NO a las hormonas cuando la Naturaleza lo empuja hacia el placer y la unión sexual, es la única práctica que evita el contagio y la propagación del SIDA. No sabemos si esta medida alcanza a los niños que son penetrados por sacerdotes pedófilos o si estos, después de consumar el acto, se realizan controles para detectar el HIV en ellos o en sus víctimas. Si usted se quiere sumar a esta loable campaña debe seguir estos sabios consejos: no debe concurrir a playa nudista alguna; obligue a su mujer y o/novia y o/amante a acostarse vestida; sugiera a su compañera a que use ropa 4 o 5 talles más grandes y que deseche la loca idea de usar jeans de lycra que marquen su figura. Y por supuesto que queda prohibido bañarse desnudo y menos frotarse con el jabón el sexo. En la TV sólo puede ver noticieros y dibujos animados de los años 50, para alejarlo de cualquier tentación. Si ve a una mujer amamantando un crío no lo dude: tras persignarse comience a correr en sentido contrario. Puede parecer duro, pero luego me lo agradecerá.
Más preocupado por la difusión del SIDA que por la Crisis Financiera que corroe los cimientos de Occidente, Su Santidad aconsejó en su reciente visita al África que la Abstinencia, el difícil ejercicio de decir que NO a las hormonas cuando la Naturaleza lo empuja hacia el placer y la unión sexual, es la única práctica que evita el contagio y la propagación del SIDA. No sabemos si esta medida alcanza a los niños que son penetrados por sacerdotes pedófilos o si estos, después de consumar el acto, se realizan controles para detectar el HIV en ellos o en sus víctimas. Si usted se quiere sumar a esta loable campaña debe seguir estos sabios consejos: no debe concurrir a playa nudista alguna; obligue a su mujer y o/novia y o/amante a acostarse vestida; sugiera a su compañera a que use ropa 4 o 5 talles más grandes y que deseche la loca idea de usar jeans de lycra que marquen su figura. Y por supuesto que queda prohibido bañarse desnudo y menos frotarse con el jabón el sexo. En la TV sólo puede ver noticieros y dibujos animados de los años 50, para alejarlo de cualquier tentación. Si ve a una mujer amamantando un crío no lo dude: tras persignarse comience a correr en sentido contrario. Puede parecer duro, pero luego me lo agradecerá.
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