YO TE SIGO A TODAS PARTES MI REINA

El fervor popular que desató la presencia de la Presidente Cristina Fernández de Kirchner en la Cumbre del Mercosur fue sólo comparable con la algarabía de los franceses al ser liberados de la opresión nazi en la Segunda Guerra Mundial. Desde cada pueblo infame e infecto de la República Bananera del Río de la Plata militantes y defensores a ultranza de la democracía viajaron a escuchar sus enriquecedores discursos. Y se lanzaron a las calles a contemplar de cerca, unos 3500 metros, su incomparable belleza. Conmovedor. Los otros líderes de la región apelaron a la ingesta desenfrenada de ansiolíticos, mezclados con alcohol en algunos casos, para poder sobrellevar la envidia que sintieron de esta fiesta popular.